El ex-lehendakari Carlos Garaikoetxea dijo en el "Fórum Europa. Tribuna Euskadi" que la sociedad vasca debe apostar por un modelo de nacionalismo de “autodefensa” e "integrador", y no de “imposición”.
El ex-presidente del Gobierno vasco hizo estas declaraciones durante la presentación de una conferencia de su compañero de partido Pello Urizar, secretario general de Eusko Alkartasuna (EA), en el citado foro de debate, organizado en Bilbao por Nueva Economía Fórum.
Garaikoetxea calificó a Urizar de “demócrata radical a la hora de defender los derechos humanos en toda circunstancia, a la hora de mantener una concepción ética de la política y jamás aceptar que el fin justifica los medios, pero radical también a la hora de reivindicar para este pueblo un poder político que no es el que se corresponde con ese nacionalismo impositivo”.
Garaikoetxea calificó a Urizar de “demócrata radical a la hora de defender los derechos humanos en toda circunstancia, a la hora de mantener una concepción ética de la política y jamás aceptar que el fin justifica los medios, pero radical también a la hora de reivindicar para este pueblo un poder político que no es el que se corresponde con ese nacionalismo impositivo”.
NACIONALISMO ABIERTO
Explicó que el nacionalismo que defiende es una nacionalismo "de autodefensa, que quiere que este pueblo siga en pie”. Asimismo, pidió que el pueblo vasco “no sea una especie de arqueología política, sino que siga en pie”.
Opinó que hay nacionalismos impositivos, “que hablan de obsesiones identitarias de un pequeño pueblo como este que trata simplemente de sobrevivir, sin imponer leyes a nadie ni imponer sus costumbres ni cultura”.
Frente a este modelo de nacionalismo, Carlos Garaikoetxea defiende "un nacionalismo abierto a todas las corrientes y abierto a todas las personas que quieran integrarse en él”.
Garaikoetxea confesó que cuando Urizar le comunicó que “este proceso (de paz) iba en serio, me transmitió la confianza de que efectivamente era verdad”. “Me sentí convencido y tranquilo al respecto pensando que era un momento histórico e irreversible en la dirección buena”.
Explicó que el nacionalismo que defiende es una nacionalismo "de autodefensa, que quiere que este pueblo siga en pie”. Asimismo, pidió que el pueblo vasco “no sea una especie de arqueología política, sino que siga en pie”.
Opinó que hay nacionalismos impositivos, “que hablan de obsesiones identitarias de un pequeño pueblo como este que trata simplemente de sobrevivir, sin imponer leyes a nadie ni imponer sus costumbres ni cultura”.
Frente a este modelo de nacionalismo, Carlos Garaikoetxea defiende "un nacionalismo abierto a todas las corrientes y abierto a todas las personas que quieran integrarse en él”.
Garaikoetxea confesó que cuando Urizar le comunicó que “este proceso (de paz) iba en serio, me transmitió la confianza de que efectivamente era verdad”. “Me sentí convencido y tranquilo al respecto pensando que era un momento histórico e irreversible en la dirección buena”.
Fuente: diario SIGLO XXI.com
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