Diario Clarín (Argentina)
El Parlamento vasco aprobó hoy el llamado Plan Ibarretxe hacia la autodeterminación, gracias a los votos de tres parlamentarios de Sozialista Abertzaleak (SA), sucesora del ilegalizado partido Batasuna.
El lehendakari (jefe del gobierno vasco) Juan José Ibarretxe reiteró tras la votación que convocará a un referendo para ratificar el plan, apoyado por 39 legisladores sobre 38 requeridos para su aprobación.
Votaron a favor los oficialistas partidos Nacionalista Vasco (PNV), Eusko Alkartazuna (EA) y Ezker Batua (EB, Izquierda Unida vasca), además de tres legisladores de SA, y en contra el conservador Partido Popular (PP) y el Socialista (PSE), expresión vasca del PSOE gobernante en España.
Ibarretxe afirmó hoy ante el Parlamento que tras la aprobación de la reforma del Estatuto de Autonomía del País Vasco le dará "la palabra al pueblo" en un futuro referendo.
Antes de la votación, el lehendekari sostuvo que la "esencia de la democracia y la clave de la solución (para la cuestión de la autodeterminación) es el derecho de la sociedad vasca a decidir su propio futuro".
El Plan aprobado, agregó, "se basa en los derechos históricos recogidos en los textos constitucionales y en la voluntad de los vascos hoy".
La reforma del Estatuto autonómico, dijo Ibarretxe, "no propone un proyecto para romper con España", sino una convivencia "amistosa" pero con la premisa de que "Euskadi (el País Vasco) no es parte subordinada del Estado español".
Esta propuesta "no ofrece el puño, ofrece la mano", aseveró. "Vamos a darle la palabra al pueblo (en el futuro referendo) para que decida", porque "nadie va a decidir nuestro futuro por nosotros".
El Plan Ibarretxe, lanzado por el lehendekari en el 2002, sostiene la existencia de un pueblo vasco con identidad propia repartido en dos Estados (España y Francia) y con el derecho a decidir el propio futuro, la autodeterminación.
También contempla la materialización de este derecho mediante un referendo o consulta popular directa a los ciudadanos del País Vasco, Navarra e Iparralde, para que se pronuncien sobre el Plan.
Establece además el compromiso de no ejercer unilateralmente el derecho de autodeterminación, la ciudadanía para todos los habitantes del País Vasco y la oficialización de la nacionalidad vasca, compatible con la española y sin necesidad de renunciar a ésta.
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