- ELECCIONES EUROPEAS 2014: EA ARGENTINA CON LORENA LOPEZ DE LA CALLE Y JOSU JUARISTI. -
Eusko Alkartasuna Argentina - contacto: euskoalkartasuna.argentina@gmail.com

>><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><><<

16 de enero de 2005

«Con una represión feroz, España no podría presentarse en Europa»

Carlos GARAIKOETXEA - Ex lehendakari del Gobierno de Lakua
Gara

Garaikoetxea mira al momento actual desde la perspectiva de tres décadas de responsabilidad política al máximo nivel, y observa garantías suficientes para dar el salto hacia la emancipación nacional. Advierte de que habrá momentos duros, pero se muestra convencido de que el Estado español tendrá que afrontar el reto «quiera o no».

­El 30-D en el Parlamento de Gasteiz hubo sonrisas, caras de póker, y también rostros de preocupación. ¿Cuál fue la suya cuando vio que el plan de Ibarretxe iba a salir aprobado?

Para mí y para otros muchos compañeros, incluidos los allí presentes, lo que predominó fue la sorpresa, aunque yo ya había comentado que me sorprendía que Batasuna no votara a favor, por varias razones. No precisamente por entusiasmo con el plan, pero sí, por ejemplo, por adquirir un protagonismo extraordinario en la escena. Y también por, digámoslo eufemísticamente, contemplar la autenticidad de algunas posturas. Pero es cierto que hubo caras de preocupación, y hasta de desolación diría yo.

­Josu Jon Imaz ha citado el referente de la negociación entre usted y Adolfo Suárez, ¿qué paralelismos y qué diferencias hay entre aquel momento y ahora?

Los momentos son absolutamente diferentes. Entonces estaba el gravísimo riesgo de un retorno a una dictadura, que sería de un alcance imprevisible. Y teníamos unas enormes urgencias en el país. Eso requería un esfuerzo de pragmatismo muy especial. Había que apuntalar el país en el orden lingüístico, porque el euskara estaba en trance agónico en muchos lugares. En el orden económico y social, la situación era espantosa, con un 25% de paro. El PIBcaía un 5 ó un 6% anual, lo que hoy es una barbaridad. Y había un expolio fiscal, porque el Estado se llevaba más del 80% de los recursos imprescindibles para apuntalar esa industria que se hundía... Así que hubo que llegar a un acuerdo que fue un compromiso táctico. Evidentemente, nuestros objetivos estratégicos iban mucho más lejos. La negociación, de cualquier modo, tuvo mucha más dureza de la que hoy imaginan algunos...

­¿Por ejemplo?

Hay que recordar que desde los dos extremos del espectro político hubo una oposición a la fórmula adoptada. Los paladines del Estatuto de hoy de la derecha son los herederos de aquella Alianza Popular que votó en contra. Y en el nacionalismo había una fractura que hoy pervive; en eso hay ciertas semejanzas. La negociación fue muy dura porque el partido del Gobierno español puso multitud de «motivos de desacuerdo», como se llamaban entonces. Pero el acuerdo contenía elementos para apuntalar el edificio: recuperábamos los recursos del país, y eso permitió solventar crisis de los sectores básicos y dar la vuelta a la situación. A las pruebas me remito. Naturalmente, como siempre sucede con estos principios legislativos básicos, había muchos conceptos indeterminados, y ahí está siempre el re- curso para quienes tienen voluntad política y quienes no la tienen. Por eso, siempre digo que la reforma la ha hecho el Estado con una utilización desleal y restrictiva de esos conceptos indeterminados, sustrayendo al país buena parte de las potencialidades del acuerdo.

­¿Yel derecho de autodeterminación? Usted ha escrito en sus memorias que «sabíamos que los intentos de hacerlo prosperar estaban condenados al fracaso»...

Eso suponía una evidencia para cualquiera que viviera aquellos momentos. Sabíamos cuál era la fragilidad del sistema, y que nuestra demanda sólo podía ser puramente testimonial. Por eso pensamos que era mejor abrir una disposición específica que remitiera a derechos históricos con un alcance indefinido, de modo que pudiera permitir en el futuro la articulación de un poder político también indefinido, en función de la voluntad política futura de los interlocutores. Naturalmente, lo que se hizo era remitir la cuestión a un momento más propicio en términos políticos.

­¿Es éste el momento? ¿Es posible ahora el reconocimiento de la autodeterminación?

Hacerlo ahora es mucho menos jugar a la ruleta rusa que en 1977. Entonces era imposible. Ahí estaban el 23-F, la Operación Galaxia... Y eso lo vimos nosotros, lo vio Carrillo, lo vio todo el mundo que tenía que jugar entonces a la política real y no a otra cosa.

­¿Yqué factores son los que hacen viable esa posibilidad?

Entre otras cosas, el sistema político español actual, con todas sus limitaciones y vergüenzas, tiene el cerco de una Europa con solera democrática que haría inconcebible que en su seno hubiera un régimen dictatorial y se produjera una represión brutal como la que era más que previsible en aquel momento. Hoy estamos hablando con normalidad cotidiana de conceptos que entonces eran prácticamente anatemas, como la autodeterminación o la independencia. Son parte del menú político. Yo todavía recuerdo las primeras conferencias de gentes que ahora estamos en diferentes partidos abertzales, en la dictadura, y recuerdo el rumor que había en los frontones y los teatros cuando oían la palabra «Euskadi». Para mí, hoy es inconcebible una marcha atrás. Si el Estado español desoyera con una represión feroz un planteamiento legítimo de una mayoría de la sociedad vasca y ésta lo hiciera patente ante el mundo y Europa a través de sus legítimos representantes, España no podría presentarse en Europa. Si hemos llegado a la hora de la verdad en una confrontación democrática, una actitud clara de firmeza de un Parlamento que por mayoría representa la voluntad popular ante todos los testigos de Europa es nuestro mejor recurso.

­¿Ycree que ése es el escenario que se va a producir?

Yo creo que sí. Parece más que previsible que todo el mundo va a mantener las posiciones actuales. Por desgracia, creo que el PSOE no va a dejar la trampa en la que le ha sumido el PP, rivalizando en esa invocación patriótica de la unidad. Y desde luego yo tengo la absoluta seguridad de que EA no va a cejar en sus posiciones, y espero que el PNV responda. Creo que ésa es la postura de Ibarretxe, por lo menos.

­¿Le ha sorprendido la reacción española tras el 30-D? Se está hablando de la revocación de la autonomía, del Ejército...

La sutileza de Fraga y de otros representantes de la derecha y la izquierda no me preocupan tanto como esa mentalidad ya inmemorial que alienta en toda la clase política desde los tiempos de Godoy. Una reivindicación nacional nos lleva a un momento de crisis inexorable, y hay que saber elegirlo. En 1977 habría sido un despropósito. Hoy estamos en un sistema que, guste o no guste, tendrá que asumir el desafío de una reivindicación democrática. Pero vamos a tener que asumir una crisis seria, y tendremos entonces encima a los sectores económicos que ven sacudidas sus preocupaciones, veremos manipulaciones informativas enormes... Eso es algo con lo que hay que contar. Ha habido revoluciones incruentas, y hasta de claveles, y eso es lo que hay que intentar, que la tensión política no pase de ahí. -

«Espero una aproximación al realismo de la ex Batasuna»­¿La única vía para forzar la crisis de que habla es el proyecto de Ibarretxe? ELA o Batasuna piden otro consenso mayor, no les gusta el plan.

ELA se ha pronunciado bastante positivamente. Todo el mundo invoca consensos de un tipo u otro, pero esas invocaciones a veces son algo topicudas, porque, para empezar, el proceso lleva casi cuatro años en el Parlamento Vasco, y ahí se ha visto la oposición de partidos minoritarios que no han querido jugar a eso. A veces es fácil decir ‘quiero un consenso total’ y utilizar eso como un derecho de veto. Eso lo hacen los partidos españoles. Todo el mundo se escandaliza de que no haya una mayoría más amplia, pero nadie se escandaliza de que una minoría tenga a raya a una mayoría que reclama más autogobierno. Y en cuanto al mundo de la ex Batasuna, el problema de todos los países que están en un proceso de emancipación es dónde hay que poner el listón del pragmatismo. Yo tengo la esperanza de que en ese mundo haya una aproximación a esa visión realista.

­Pero, ¿la visión realista es la cosoberanía? ¿Es proclamar el derecho de decisión y abocarlo luego al acuerdo con el Estado español?

A veces, «del adversario el consejo». He oído a tres ilustres adversarios del nacionalismo señalar que el esquema de esta propuesta es muy claro:primero se proclama el derecho de un pueblo vasco, en su integridad territorial, a la libre determinación; después se propone una ampliación del autogobierno, sin perjuicio de que pueda conducir a otro estatus político. Y ellos decían como conclusión: «Verde y con asas». En el mundo de esa izquierda abertzale oficial, tienen que ver también si ése es el esquema.

­¿Le preocupa que Nafarroa quede de nuevo descolgada en esa fórmula?

Sí, pero no nos engañemos. Que nadie se haga la ilusión de que una fórmula u otra de las que vayan a surgir de una conciencia nacional vasca va a tener mejor acogida, porque siempre va a haber un proceso de intenciones. Esto es como cuando algunos piensan que invocar a la Navarra histórica en lugar de Euskal Herria como fundamento del derecho de autodeterminación puede ser más digerible para los que tienen muy claro que lo que les importa es la idea que subyace. Un preclaro representante de esta derecha navarra siempre me decía cuando discutíamos:«Me da igual que digas Euskadi, Vasconia, Nafarroa o la Navarra histórica, lo que me importa es lo que hay detrás». En Navarra lo que hay que recobrar es la conciencia de su primera identidad, su condición de raíz y tronco de Euskal Herria. Y contar con la voluntad de los que aquí vivimos. Se necesita una lucha política civilizada, porque no hay fórmulas milagrosas de la noche a la mañana, ni aquí ni en Iparralde. -

12 de enero de 2005

Rafa Larreina subraya que el plan para un nuevo Estatuto es un proyecto democrático con potencialidad para resolver el conflicto político

Tras su encuentro con el lehendakari Ibarretxe


El portavoz parlamentario de Eusko Alkartasuna, Rafa Larreina, ha defendido tras su encuentro con Juan José Ibarretxe que el Plan para un nuevo Estatuto es “un proyecto democrático, institucional, con potencialidad para resolver el conflicto político y que servirá para mejorar los problemas diarios de la ciudadanía”.

Larreina ha trasladado al lehendakari -que durante el día de hoy se ha reunido con los portavoces de todos los grupos parlamentarios excepto el PP, que ha declinado la invitación- la posición de Eusko Alkartasuna sobre la situación que se abrió tras la aprobación del proyecto de nuevo Estatuto y su postura ante la reunión que éste mantendrá mañana con el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero. Sobre este encuentro, el portavoz abertzale ha subrayado que Rodríguez Zapatero “debe admitir una decisión que emana de la soberanía, de la legitimidad de una institución democrática vasca”.

“Igual que dijo que respetará la decisión que adopte el Parlamento de Catalunya, debe comprometerse a respetar la adoptada por el Parlamento Vasco, que es fruto de un debate en el que todos han podido participar y quien no lo ha hecho ha sido porque no ha querido”, ha añadido el parlamentario de Eusko Alkartasuna.

En segundo lugar, Larreina ha querido destacar que la propuesta aprobada el pasado 30 de diciembre “contiene dos elementos con una potencialidad muy importante para solucionar el problema político, y que son la territorialidad y la soberanía”. Por ello, ha pedido a Rodríguez Zapatero “audacia para dar el paso adelante necesario”.

Por último, el portavoz de Eusko Alkartasuna ha asegurado que el proyecto para nuevo Estatuto contribuirá también a solucionar los problemas diarios de la ciudadanía vasca: “hará posible que se viva mejor, que siga aumentando la calidad de vida incluso en mayor medida que actualmente”.


Ziarreta afirma que EA defenderá la aplicación ´unilateral´ de medidas para llevar a efecto el Plan si se aprueba en consulta



El secretario general de EA, Unai Ziarreta, afirmó hoy que si la sociedad vasca apoya el Plan del Gobierno vasco en la consulta que tiene previsto llevarse a cabo, su partido defenderá ´con claridad´ la aplicación ´unilateral´ de cuantas medidas ´sean necesarias´ para llevar a efecto esta propuesta.

En una entrevista a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, señaló que esperan que haya posibilidad de acercamiento con el PSOE, un partido que, a su juicio, tiene una ´oportunidad histórica y clara para solucionar, de una vez por todas, el conflicto histórico que sufre este país´.

En su opinión, el PSOE tiene que ´sacudirse el seguidismo que viene haciendo del PP´ e indicó que esperan que esté ´a la altura de las circunstancias y tenga visión de Estado´.

El dirigente de EA señaló que el PSOE tiene que ser capaz de llegar a ´determinados consensos´ sobre el Plan y advirtió de que si finalmente la respuesta es un ´no rotundo´, existe el compromiso de someter el texto a consulta popular ´para preguntar a la ciudadanía si quiere seguir por el camino emprendido el día 30´.

Ziarreta indicó que si en esa consulta la ciudadanía apuesta por ´seguir con el camino emprendido el día 30´, EA va a defender ´con claridad´ la aplicación ´unilateral de cuantas medidas sean necesarias para llevar a efecto el Plan´.

El representante de EA señaló que si el Congreso de los Diputados rechaza el Plan del Gobierno vasco se estaría dando ´un pisoteo de un marco ajeno a la realidad vasca como es el Congreso de lo que es la soberanía de la comunidad autónoma vasca expresada en el Parlamento vasco´.

Ziarreta indicó que para su partido la Propuesta de Nuevo Estatuto Político es ´de mínimos´ en la medida en que EA defiende la independencia y la conformación de un Estado vasco y, según precisó, esta iniciativa ´no es secesionista e independentista´ sino que es la reforma de un Estatuto que ´pretende ahondar en mayor autogobierno´.

A su juicio, dentro del Plan Ibarretxe, para EA es innegociable el reconocimiento explícito del derecho de los vascos a decidir en cada momento cuál debe ser la relación con Estado, con otras Comunidades autónomas y con Europa. ´Ese es el mínimo innegociable´, añadió.

POSTURA BATASUNA

Ziarreta, tras señalar que se despidió 2004 con ´una alegría inmensa´ al aprobarse el Plan en el Parlamento vasco, señaló que hasta la semana del propio debate del Plan intuía que, teniendo en cuenta lo que había sido la Propuesta de Anoeta, se podía producir un apoyo de SA que permitiera la aprobación de la iniciativa del Gobierno vasco.

No obstante, indicó que las declaraciones que se produjeron esa semana por parte de dirigentes de Batasuna como Arnaldo Otegi y Joseba Permach hacían pensar que ´iban a votar en contra´, aunque el mismo día de la votación llegaron ´rumores´ de que se podía producir lo que finalmente ocurrió en el pleno.

Ziarreta, tras indicar que ´desde una óptica política era previsible que se produjera lo que se produjo´, señaló que ha sido la propia sociedad vasca la que ´obligó´ a Batasuna a adoptar esa postura y precisó que si hubieran votado en contra ´se hubieran quedado clarísimamente fuera de juego´ y habrían tenido ´serios problemas´ para explicar ´el bloqueo al avance soberanista´.

Por otra parte, el secretario general de EA indicó que su partido defiende el ´diálogo´ y que la propuesta de Batasuna también iba en esa línea y en la de plantear una negociación se cuestiones técnicas de desmilitarización´. En este sentido, señaló que esperan que esos contactos, ´si no se están produciendo´, se vayan dando.

ELECCIONES

En relación a las próximas elecciones autonómicas vascas, señaló que serán ´claves´ y que es importante lograr una ´mayoría fuerte´ para llevar a efecto ´lo que la sociedad diga que hay que hacer´.

´Tenemos un instrumento que es el texto aprobado el día 30 y tenemos que elegir los actores para desarrollarlo. A nadie se le escapa que si el próximo lehendakari es socialista no se va a desarrollar el texto aprobado como nosotros quisiéramos. Por eso nos parece fundamental obtener una mayoría clara y suficiente que posibilite un gobierno vasco capaz de hacer frente a los retos de los próximos cuatro años´, indicó Ziarreta quien añadió que el 30 de diciembre se ´abrió´ la campaña electoral.

Por otra parte, preguntado por si cree que el hecho de acudir en coalición con PNV a las elecciones ´erosiona´ la imagen de EA, Ziarreta indicó que ´en parte´ comparte esa opinión pero que el partido tiene un ´alto sentido de responsabilidad y del país´ y que se está en una situación política que ´no es normal´ con una ´violencia de un signo y otro y con una situación de limitación de libertades´.

Por tanto, según precisó, EA considera que, en aras a conseguir ´mayores cotas de libertad para Euskal Herria´, a veces ´hay que dejar ´pelos en la gatera y renunciar un poco a marcar nuestro perfil´.

No obstante, afirmó que espera que ´en breve´ se produzca una situación normalizada en la que se pueda acudir a una confrontación política con el resto de fuerzas, entre ellas el PNV.

CONSTITUCION EUROPEA

Por otra parte, reiteró que EA pedirá el ´no´ en el referéndum a la Constitución europea en la medida en que, a juicio de esta formación, el texto no es una ´auténtica´ Constitución sino un ´acuerdo entre Estados´ y que se elaboró omitiendo a ´las naciones sin Estado´. Ziarreta añadió que a ello hay que añadir que el tratado constituyente ´no respeta´ los derechos lingüísticos y no aboga por un modelo social.

Respecto al hecho de que el PNV apoye la Constitución, indicó que el partido jeltzale y EA son dos formaciones ´diferentes´ y que, a pesar de tener ambas ´un objetivo claro a nivel político en Euskal Herria´, les separan ´muchas cosas que se verán en la campaña del referéndum de la Constitución europea´.

10 de enero de 2005

Larreina pide a Zapatero ´valentía´ y entendimiento con. partidos ´comprometidos con la democracia´

Destaca que el obispo Uriarte defiende ´la libertad de todos´ y ´no entre en cuestiones partidistas e ideológicas´

El secretario de Organización de Eusko Alkartasuna, Rafael Larreina, pidió hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ´valentía e inteligencia política´ para aprovechar ´esta oportunidad histórica´ y abordar ´el problema´ vasco, y le reclamó que busque vías de entendimiento con los partidos con ´mayor compromiso con la democracia´.

En declaraciones a Europa Press, el portavoz de EA se refirió, de esta manera, al ofrecimiento realizado por el líder del Ejecutivo central al PP para mantener una posición ´coincidente´ con respecto al Plan del Gobierno vasco. En este sentido, insistió en que debería Zapatero debería ´buscar vías de entendimiento con las fuerzas políticas que tienen demostrado mayor compromiso con la democracia y la libertad´.

Por el contrario, argumentó que ´ahondar en las políticas del pasado de recorte de libertades del PP y en políticas que tienden a un modelo de estado más propio del régimen anterior y que no admiten la realidad de un estado plurinacional es un error´. En este contexto, añadió que ´en el pasado nunca hay soluciones´, sino que éstas se encuentran ´en el futuro, con mentalidad abierta, con mentalidad que respete los derechos de todos los ciudadanos´.

De esta manera, insistió en que ´decir no a la propuesta aprobada en el Parlamento vasco es perpetuar la situación de exclusión´ que, en su opinión, existe en la actualidad. ´El 60 por ciento de la Comunidad Autónoma Vasca, en función de los resultados electorales que tienen su traslación en el Parlamento vasco, tiene recortados sus derechos con respecto al 40 por ciento restante, en el sentido de que se le está imponiendo un modelo político que no admite la posición de ese sesenta por ciento´, agregó.

Por el contrario, la propuesta de nuevo Estatuto Político ´contempla y admite la posición política de el cien por ciento de los ciudadanos´ vascos, excluyendo a ´quien no esté en claves democráticas´.

Ante esta situación, Larreina consideró que José Luis Rodríguez Zapatero ´tiene la oportunidad de ser un hombre de Estado´ y aportar soluciones a ´un problema que lleva en distintas manifestaciones más de cien años´. No obstante, advirtió de que ´también tiene la oportunidad de repetir el fracaso de José María Aznar´, que se encontró, de igual manera, con ´esta oportunidad´ y ´fracasó, pasando a la historia no por solucionar problemas, sino por crear más problemas´.

Por ello, indicó que sería ´triste´ que el actual presidente del Gobierno ´quiera pasar a la historia siguiendo la estela de Aznar´ y ´pase a la historia por crear problemas y no por solucionarlos´.

Por otro lado, en relación a la encuesta publicada hoy por el diario El Mundo en la que se afirma que la mayoría de los ciudadanos del Estado preferiría acuerdos parlamentarios entre PSOE y PP frente a otros partidos, se mostró convencido de que, ´si se pregunta a los ciudadanos qué quieren, si la solución definitiva del problema político no resuelto o la perpetuación de ese problema, el 90 por ciento estarían a favor de la solución de ese problema´.

Por tanto, reiteró que ´lo que hay que plantearse´ es si el Ejecutivo que dirige José Luis Rodríguez Zapatero ´quiere pasar a la historia como un gobierno que solucione el problema o como un gobierno anodino que siguió alimentando los conflictos como habían hecho gobiernos anteriores´.

En este sentido, pidió al presidente del Gobierno central ´valentía e inteligencia política´ para abordar ´el problema de fondo´ y ´buscar la solución al problema entre Euskal Herria y el Estado´. Así, le instó a aprovechar ´esta oportunidad histórica de poder conseguir esa solución´.

En cuanto al comunicado del Obispo de Donostia, Juan María Uriarte, el dirigente de EA manifiesta que Uriarte prefiere ´no entrar en cuestiones partidistas e ideológicas´ y opta por ´simplemente defender la libertad de todos´.

Expresó su ´respeto´ hacia el comunicado difundido por el Obispo guipuzcoano tras la valoración de la Conferencia Episcopal sobre el Plan Ibarretxe, en la que aboga por que sean los ciudadanos los que elaboren ´sin proteccionismos ni intervencionismos eclesiales´, sus propias opciones políticas, con ´el objetivo superior de la paz y la reconciliación de nuestra sociedad´.

El portavoz de Eusko Alkartasuna considera ´lógica´ esta postura, teniendo en cuenta que, a su juicio, la nota de la Conferencia Episcopal, a su entender, ´no contribuye al entendimiento, ni a la distensión ni a subrayar los elementos fundamentales que deben unir a todas las personas´.

Por el contrario, consideró que el comunicado realizado por la Conferencia Episcopal el pasado viernes incide en ´la separación y en la exclusión de una parte´, en el sentido de que ´niega derechos a ciudadanos´.

En este sentido, destacó que la comunicación de Juan María Uriarte ´no entra en cuestiones partidistas e ideológicas´, sino que ´simplemente defiende la libertad de todos´.

Para Larreina, el ´objetivo fundamental´ de la Conferencia Episcopal debería ser también defender ´la libertad´ en materia política ´de todos sus fieles, y no sólo de una parte´.


Atutxa entregará el proyecto el próximo viernes en el Congreso de los Diputados

Se prevé que Atutxa y Marín dialoguen ese día sobre el procedimiento que se utilizará en el Congreso para tramitar el Plan Ibarretxe

BILBAO, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Parlamento Vasco, Juan María Atutxa, entregará el próximo viernes a las diez de la mañana, al presidente del Congreso de los diputados, Manuel Marín, el proyecto de Nuevo Estatuto aprobado el pasado 30 de diciembre en la Cámara autónoma.

El texto va acompañado de una comunicación dirigida a Manuel Marín y la correspondiente certificación de lo ocurrido en la sesión plenaria en la que el Plan Ibarretxe fue aprobado, firmada por la secretaria primera de la Mesa Isabel Celaá y rubricada igualmente con el visto bueno de Atutxa.

Juan María Atutxa acudirá al Congreso con dos copias de la propuesta de Nuevo Estatuto, ambas en versión bilingüe. La primera será entregada al presidente del Congreso y registrada oficialmente para iniciar el trámite correspondiente.

La segunda será sellada y volverá al legislativo autonómico para ser depositada en sus archivos. El documento que certifica el resultado de la sesión plenaria del pasado día 30 tiene el número de salida 10.380 del registro general de la Cámara vasca y está fechado el mismo día en que se produjo la sesión plenaria.

Según explicó la Presidencia del Parlamento en una nota, el texto da fe en cinco líneas de que la Cámara vasca ha aprobado la propuesta de Reforma del Estatuto.

Durante la entrega esta previsto que Marín y Atutxa dialoguen sobre el procedimiento que se utilizará en el Congreso para tramitar esta propuesta de reforma del EStatuto.

8 de enero de 2005

La Iglesia española se une a la campaña contra el plan Ibarretxe

La Conferencia Episcopal Española se ha sumado a la campaña para frenar el desarrollo de la iniciativa aprobada el 30 de diciembre en el Parlamento de Gasteiz, con un comunicado en el que afirma que «negar unilateralmente la soberanía española no sería moralmente aceptable». La jerarquía eclesiástica retoma así la polémica que suscitó su pastoral de noviembre de 2002, que fue muy cuestionada en Euskal Herrria, incluso entre sectores de base cristianos. Los prelados españoles califican de «degenerado» al nacionalismo vasco.

MADRID

La Conferencia Episcopal Española (CEE)ratificó ayer su concepción de que sólo la soberanía española resulta «moral- mente aceptable». En una nota de prensa que retoma la polémica pastoral de noviembre de 2002, que fue muy cuestionada en Euskal Herria, los obispos se hacen eco de la aprobación del plan de Ibarretxe y anuncian que se ven obligados a exponer su opinión para «respetar y tutelar el bien común de una sociedad pluricentenaria».
Tras subrayar que «España es fruto de complejos procesos históricos», la CEE establece en esta nota que «poner en peligro la convivencia de los españoles, negando unilateralmente la soberanía de España, sin valorar las graves consecuencias que esta negación podría acarrear, no sería prudente ni moralmente aceptable».

El comunicado abunda en críticas genéricas a los naciona-lismos, pero referidas obviamente a sólo uno de ellos:el na- cionalismo vasco. Recuerda a quienes tienen esta concepción que deben atenerse al «bien común» y «los derechos de todos» los ciudadanos, «porque cuando estas condiciones no se respetan, el nacionalismo degenera en una ideología y un proyecto excluyente, incapaz de reconocer y proteger los derechos de los ciudadanos, tentado de aspiraciones totalitarias».

La jerarquía eclesiástica española acepta la existencia de «determinadas naciones o realidades nacionales», pero entiende, en referencia indirecta a Euskal Herria, que «cuando éstas se hallan legítimamente vinculadas por lazos históricos, familiares, religiosos, culturales y políticos a otras naciones dentro de un mismo estado no puede decirse que gocen necesariamente de un derecho a la so- beranía política».

Colonias o «invasión injusta»

Ahondando en el mismo argumento, la CEE estima conveniente aclarar que si bien la llamada Doctrina Social de la Iglesia reconoce el derecho de autodeterminación, eso es aplicable «al caso de una colonización o invasión injusta, pero no a una secesión».
El posicionamiento de la CEE no por conocido dejó de suscitar críticas. Batasuna, EB, Aralaro PNVlo rechazaron o cuestionaron. Desde esta última formación, su portavoz en el Congreso, Josu Erkoreka, recordó a la CEE que «no se puede mantener a ultranza unilateralmente un ordenamiento ju- rídico contra la voluntad de la sociedad vasca».



7 de enero de 2005

La Audiencia Nacional archiva la querella de la AVT contra Arzalluz y Garaikoetxea

La querella basaba su acusación en unos supuestos acuerdos secretos firmados por las dos formaciones nacionalistas con ETA entre agosto de 1998 y el verano de 1999 y que habrían desembocado en el Pacto de Lizarra. Asimismo, denunciaba que, en ese periodo, existió entre los dos partidos y la organización terrorista una colaboración "fructífera, eficaz, intensa e ininterrumpida".

Europa Press Madrid

El Juzgado Central de Instrucción Número 6 de la Audiencia Nacional ha archivado la querella presentada el pasado mes de diciembre por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) contra los ex presidentes del PNV y de EA, Xabier Arzalluz y Carlos Garaikoetxea, por un presunto delito continuado de colaboración con banda terrorista, según confirmó el presidente de esta organización, Francisco José Alcaraz.

La querella basaba su acusación en unos supuestos acuerdos secretos firmados por las dos formaciones nacionalistas con ETA entre agosto de 1998 y el verano de 1999 y que habrían desembocado en el Pacto de Lizarra. Asimismo, denunciaba que, en ese periodo, existió entre los dos partidos y la organización terrorista una colaboración "fructífera, eficaz, intensa e ininterrumpida".

La Audiencia Nacional señala en su escrito de inadmisión de la querella, firmado por el magistrado Félix Degayén Rojo, que los hechos denunciados por la AVT no son considerados como "constitutivos de infracción penal", por lo que decreta el archivo de las actuaciones judiciales al respecto.

En el texto de archivo se señala además que el presunto acuerdo entre ETA, PNV y EA, que no llega a determinar si existió o no, no puede ser considerado delito y que en todo caso sólo constituiría "una plasmación escrita de una clara y conocida coincidencia en la concepción política del País Vasco" por parte de los firmantes del supuesto acuerdo, coincidencia que no favorece "en absoluto" a la banda terrorista.

Tanto el fiscal como el magistrado coinciden al estimar que los hechos denunciados por la AVT no constituyen delito y que el supuesto acuerdo, de existir, no supone facilitar las actividades de la banda terrorista ETA. "El compromiso de crear una institución única y soberana no puede estimarse que se trate de un proceso insurreccional dirigido a favorecer las actividades de la banda ETA, por más que pueda constituir una coincidencia de planteamientos ideológicos", señala el magistrado.

Degayén Rojo subraya además que el hecho de que, tras el supuesto pacto con ETA, EA y PNV rompieran acuerdos con otras formaciones políticas con representación parlamentaria es una actuación "perfectamente encuadrable en el normal desarrollo" de la vida política en el País Vasco.

Por último, en relación al supuesto compromiso de ETA con EA y PNV para decretar un alto el fuego -la banda anunció en 1998 una tregua indefinida-, el magistrado sostiene que dicho compromiso no supone colaboración alguna de los dos partidos, ya que la tregua se manifiesta y asume "únicamente" por parte de la banda terrorista.

extraido de DEIA
www.deia.com

6 de enero de 2005

Zapatero recibirá a Ibarretxe en la Moncloa, el 13 de enero

El presidente del Gobierno español ha anunciado hoy que recibirá a Ibarretxe el próximo jueves día 13 a las 16:30 horas, en el Palacio de la Moncloa, para hablar "a fondo" sobre el Plan Ibarretxe.

MADRID.- El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha anunciado hoy que recibirá al lehendakari Juan José Ibarretxe el próximo jueves día 13 a las 16:30 horas, en el Palacio de la Moncloa, para hablar "a fondo" sobre el Plan Ibarretxe.

Rodríguez Zapatero ha hecho pública la fecha de este encuentro en una charla informal con periodistas después de asistir a los actos de celebración de la Pascua Militar, en Zaragoza.

El jefe del Ejecutivo ha añadido que, inmediatamente después de recibir al lehendakari, se reunirá con el presidente del PP, Mariano Rajoy y, posteriormente, lo hará con representantes de otras fuerzas políticas.

Deia
www.deia.com

4 de enero de 2005

UNA SEÑAL PARA EL FUTURO DE EUSKADI

Opinión

El final del año 2004 ha sido por demás venturoso para la Nación Vasca. Una mayoría de 39 legisladores provenientes de diferentes partidos políticos, (PNV, EA; IU y SA), elegidos estos, por el voto democrático de las ciudadanas y ciudadanos de la Comunidad Autónoma Vasca, han dado su voto favorable a una propuesta de mayor autodeterminación que al comienzo de esta legislatura pusiera a consideración de la sociedad el gobierno tripartito.

Se cumple así con un paso más en la búsqueda de mayor autogobierno, y seguramente desde Madrid, se rechazará la “soberana” decisión tomada por el Parlamento Vasco. Tal vez, no nos esperen días fáciles, pero el momento que vivimos es por demás ilusionante.

Ya escucharemos con el correr de las horas y los días, los argumentos de los intolerantes, sean estos de derecha o progresistas, a los cuales solamente el escuchar lejanamente las palabras “soberanía popular” y “autodeterminación”, los predispone a indagar sobre todas las tropelías constitucionales y jurídicas que se podrán aplicar sobre tamaña determinación “secesionista”.

El diálogo es el camino, para resolver el contencioso vasco. Pero esta herramienta debe ser utilizada en todos los ámbitos de negociación. La importancia de la hora, da sobrados motivos para la reflexión. Diálogo con Madrid si, pero desde las posiciones mínimas que han sido refrendadas hoy por el Parlamento, y ese debe ser el camino correcto de los representantes del Pueblo Vasco.

Pero en lo interno también es necesario “dinamizar el diálogo”. Se deberán abrir las agendas en la búsqueda de mayores consensos, anteponiendo siempre los intereses de la Patria Vasca, a los personales y partidarios. No debemos volver a cometer los errores del pasado, que tanto le han costado nuestro pueblo.

En la política, cuando uno quiere componer, amigar, o buscar consensos mínimos produce gestos, y hoy en el Parlamento Vasco se han producido “gestos”. Todos esperamos se tome debida nota de lo que hoy ha ocurrido en Vitoria y de la importancia histórica que tiene este hecho para un pueblo, como el vasco, que hace 7000 años se desvela y lucha por decidir su futuro, en Paz y Libertad

Prof. César Arrondo
Argentina

3 de enero de 2005

“ EL PLAN ES PARA EA UN PASO ADELANTE PARA LOGRAR UN ESTADO VASCO INDEPENDIENTE”

Entrevista a Begoña Errazti en el diario “El Mundo”


Begoña Errazti vivió el pasado jueves una jornada feliz. La presidenta de EA analiza en las páginas de El Mundo el nuevo escenario que se abre en Euskadi con la aprobación del Plan del Gobierno Vasco en Gasteiz. Errazti postula sin complejos que esta propuesta constituye un avance para la independencia que su partido se propone como meta y emplaza a PSOE y PP a asumir una decisión “mayoritaria y democratica”.

Exultante de felicidad la presidenta de EA asegura, que el proyecto no tiene marcha atrás. Begoña Errazti exige al PSOE y al PP que acepten la decisión adoptada el pasado jueves en el Parlamento Vasco y afirma que la consulta popular se celebrará, aunque no haya negociaciones con el Gobierno de Rodriguez Zapatero ni el proyecto reciba respaldo de las Cortes.

Pregunta.- ¿Hubo conversaciones previas con Sozialista Abertzaleak para obtener su apoyo?

Respuesta.- Nosotros hablamos normalmente con Batasuna y siempre les hemos transmitido, en público y en privado, que nadie entendería que votaran en contra de una propuesta que es un avance para una parte de nuestro pais y que puede ser un camino hacia la normalización. Ningun abertzale hubiera entendido que Batasuna se alineara con el PP y el PSOE.

P.- ¿Ha habido algún pacto previo con Batasuna?

R.- No, no,no. Ahora dirán que hay un acuerdo, que el terrorismo apoya a no sé quién…Dirán lo que quieran, pero no ha habido ningún acuerdo.

P.- Entonces, ¿Cuándo acudieron al Parlamento desconocían la postura que iba a adoptar SA?

R.- No había ningún acuerdo.

P.- El respaldo a la propuesta del Lehendakari no es gratuito.

R.- Eso habrá que preguntárselo a Batasuna. Yo no lo interpreto en esa línea, sino de otra manera. Batasuna ha visto la presión de la sociedad y que el planteamiento general estaba donde estábamos los que defendiamos el plan del Gobierno Vasco. Se ha dado cuenta de que quedaba fuera de juego y, encima, apoyando una posición de nacionalismo y el centralismo español, que es lo que han demostrado el PP y el PSOE.

La sociedad no lo podía entender. Ha sido una exigencia de la sociedad a Batasuna.

P.- ¿Cree que se lo han pedido sus bases?

R.- Creo que la opinión dentro de Batasuna estaba dividida. La sociedad, en términos generales, no hubiera entendido un rechazo al Plan y creo que dentro de Batasuna habrá gente que tampoco. Se han dado cuenta de que el camino que estaban emprendiendo era una locura y de que no sería creíble lo que habían dicho en Anoeta. A Batasuna le toca convencer y arreglar las cosas en su mundo porque EA está donde estaba, en las vias democráticas e institucionales. Estamos convencidos de que es posible lograr la normalización política y la paz desde los partidos políticos, sin exclusiones. Batasuna es la que se ha quedado sin recorrido.

P.- El apoyo de Batasuna es crítico. Sólo respalda el preámbulo.

R.- Votó a favor del Plan y hubo 39 votos. A partir de ahí…

P.- Pero es un respaldo condicionado.

R.- Son 39 votos.

P.- ¿Van a abrir a partir de ahora un periodo de conversaciones con Batasuna para readecuar el Plan o va a seguir como está planteado?

R.- (Sonríe). Lo que está aprobado es lo que está aprobado. Además, esa pregunta no tiene sentido ni siquiera desde el punto de vista del procedimiento.

P.- Entonces, su primer paso va a consistir en negociar el proyecto con el Gobierno, que se niega en redondo.

R.- Hay una propuesta aprobada por mayoría absoluta, que a partir de ahora tiene que seguir su cauce. Y su cauce es que se lleve al Gobierno, al Congreso…Lo que no tiene ninguna credibilidad democrática que el PSOE y el PP nieguen una decisión mayoritaria de un Parlamento democrático. Ha habido una decisión democrática, legal y legítima. Quienen se opongan a la mayoría se están colocando fuera de respeto democrático.

P.- ¿Y qué sucede si Zapatero bloquea el Plan si no lo discute ni lo negocia?

R.- Que se queda fuera de ese ámbito de necesario respeto democrático a la decisión de la representación de la mayoría de los ciudadanos vascos.

P.- O sea, que haga lo que haga Zapatero, el tripartito seguirá su camino.

R.- Sí, sí, seguiremos nuestro camino. EA, sí.

P.- ¿Y el PNV? ¿Cree que los sectores moderados del PNV pueden tener miedo a que no haya una marcha atrás o prevalecerá la opinión de Egibar, que dijo que no habrá una vuelta al pasado?

R.- No hay marcha atrás. En primavera hay unas elecciones que volveremos a ganar y en las que terminaremos un trabajo que empezamos en el año 2001. Hay que ganar las elecciones y luego llegar a lo que para nosotros es el referente, que es la consulta popular.

P.- La aprobación del Plan cambia el escenario electoral.

R.- No, simplemente, lo acelera.

P.- ¿En qué sentido?

R.- Acelera el proceso. Pero, al final, a los ciudadanos les vamos a pedir una mayoría que permita formar un gobierno que lleve adelante el Plan, que es un compromiso acordado por el PNV y EA en 2001. Y ese compromiso se debe refrendar en un referéndum. Seguramente nos encontraremos con una posición absolutamente cerrada del PSOE y del PP, y escucharemos argumentaciones que ya escuchamos en el 2001 y antes, y probablemente nos encontraremos con un intento de criminalizar otra vez al nacionalismo vasco. Con lo cual, llegaremos a pedir que nos confirmen si quieren que sigamos con este trabajo, cuyo final es el referéndum. En la próxima legislatura, el Parlamento Vasco se tiene que enfrentar a este proceso. Si Madrid no quiere, el Parlamento tendrá que reafirmar esta decisión y eso significa que, si en Madrid no se respetan los cauces democráticos el Parlamento Vasco tendrá que exigir el respeto a su decisión. Y eso pasa por unas elecciones que el PNV y EA esperamos ganar por mayoría.

P.- Ya, pero no es sólo que el Gobierno se niegue a negociar el proyecto. Las Cortes tampoco lo aprobarán.

R.- Son hipótesis muy previsibles. La clave es que este Plan es legítimo y democrático porque se ha aprobado por la representación mayoritaria de los ciudadanos, del Parlamento. Quienes se colocan enfrente no respetan esa legitimidad y ese derecho a tomar decisiones.

P.- En cualquier caso, convocarán la consulta popular.

R.- Claro.

P.- Batasuna ya ha adelantado que quiere participar en el proceso del referéndum, incluso en la formulación de la pregunta.

R.- Todos los partidos del Parlamento querrán participar. Me parece normal.

P.- El Lehendakari dijo en su día que la consulta se celebraría en un escenario sin violencia que hoy por hoy no se cumple.

R.- ¿Por qué no, como petición al Año Nuevo, por qué no pedimos a los Reyes Magos que nos encontremos en los próximos meses en un escenario distinto? ¿Por qué no vamos a pensar que podemos llegar a un escenario diferente? Yo confío en que se puede llegar y, entonces, muchos obstáculos habrán desaparecido.

P.- ¿El apoyo de SA es el preludio de una tregua de ETA?

R.- Hay que ser muy prudente con esos temas, sobre todo ahora que podemos estar ante una nueva fase política y ante una situación de normalidad y paz. Nada de frivolidades. Prudencia, mucha discreción y trabajo.

P- En cualquier caso, una tregua que no fuera definitiva no es suficiente.

R.- La pacificación y normalización ya no pasan por una tregua. Ya no hay que utilizar ese término. Hay que hablar del fin de la actividad de ETA. Si realmente pensamos que podemos estar en las puertas de un escenario político para nuestro país, hay que desterrar el término tregua.

P.- Recientemente dijo que el PSOE está hablando o va a hablar con ETA.

R.- Va a hablar o está hablando, me da igual que sea ahora o pasado mañana. Es algo evidente. Si el PSOE realmente quiere hacer algo, tiene que hablar con ETA. Es necesario. No estoy interesada ni en saberlo. A mí como partido político me toca que hablemos todos los partidos sin exclusiones, por vías democráticas…Me toca ese trabajo, pero no el otro. Es una responsabilidad del Gobierno, como ha sido de otros. Aznar también se encontró con ETA. Es que la obligación de un Gobierno.

P.-¿Y de qué deberían hablar?

R.- Eso lo tendrán que decidir ellos. Hay muchos temas para hablar y el de los presos es uno de ellos. Pero hay uno del que no podrán hablar. ETA de ninguna manera se puede arrogar la representación de la ciudadanía porque no la tiene. Aunque entiendo que ETA ya no está en esas.

P.- O sea, que cree que ha cedido el protagonismo político a Batasuna.

R.- Es que ETA no ha tenido protagonismo político, aunque lo ha intentado. El protagonismo político ha estado en el Parlamento, en el Gobierno, y en los grupos que hemos defendido un Plan de avance soberanista. Esto es avanzar. Cada uno tiene su meta. En el caso de EA la meta es un Estado vasco independiente. Y la aprobación del Plan es un avance. El protagonismo político ha estado en los que hemos defendido la legitimidad de la ciudadanía vasca, que irradie hacia el resto.


P.- Para el PSOE y el PP, el Plan supone una fractura de la sociedad.

R.- Qué le vamos a hacer. Para mí no es una fractura. No se puede admitir de ninguna manera que con argumentos demagócicos y antidemocráticos se defienda y justifique que los menos tomen decisiones sobre los más. Eso no puede ser.

P.- Según el Euskobarómetro, el 49% de los vascos considera que el proyecto incrementa la inestabilidad.

R.- Sí, pero había otro dato de que el 80% de los votantes de EA está a favor de la independencia. Con el Euskobarómetro podemos llegar a conclusiones bien distintas. Como partido político, no me preocupa que determinadas personas piensen diferente a mí porque es un reflejo de la pluralidad. Pero la legitimidad de las ideas es que desde el ejercicio democrático más puro se toman decisiones que a unos gustan y a otros no. Nadie cuestionó el referéndum de Quebec. Se perdió y no pasó nada porque fue un ejercicio democrático. El PP y el PSOE, sobre todo éste último que gobierna, tienen que demostrar su talante democrático y aceptar lo que dice la mayoría de este país. Esto es un juego democrático y hay que tener claras las bases. No hay que disfrazar la realidad.

P.- Pero el PSOE y el PP consideran que este Plan les deja fuera.

R.- ¿Ah sí? No sé. Que yo sepa están en el Parlamento. Estos partidos deben optar por participar en lo que hay. No han querido participar en el debate del Plan. El PSOE presentó una propuesta de no sé qué en un hotel. Si al PSOE no le vale que el ámbito de la discusión política centralizada en una institución democrática, ¿qué le vale? ¿una mesa de partidos? ¿dónde? Ojalá lleguemos a esa mesa. Pero, ¿tampoco el Parlamento vale como representación democrática, como institución democrática? ¿O es que no le gusta lo que se debate y se ha decidido?. Es como un niño que dice que no y se lleva el balón. El PSOE tiene dos opciones: aceptar la legitimidad y la diferencia de ideas, o el bloqueo absoluto. Pero, ¿qué legitimidad democrática tiene esta segunda?. Podrás bloquear legalmente el Plan, ¿pero qué legitimidad democrática tienes frente a una mayoría que quiere lo contrario?

P.- ¿Una de las soluciones va a ser crear una mesa de partidos?

R.- Para el Plan, no. Esto ya tira para adelante. No tiene nada que ver. El Plan tiene su desarrollo y vermos qué pasa. Es absolutamente necesario que los partidos nos encontremos, pero ese argumento no se puede utilizar para paralizar una decisión adoptada por el Parlamento Vasco. No es que se han reunido cuatro y han aprobado un Acuerdo de Lizarra. No. Es que se ha aprobado en el Parlamento. Tiene legitimidad y legalidad.

P.- La aprobación del Plan puede hacer que el PSOE y el PP vuelvan a hacer un frente común.

R.- El PSOE y el PP coinciden en defender su nación española, que no dudan en defender de cualquier manera, mezclando terrorismo con nacionalismo, terrorismo con derechos históricos de los vascos, yendo en contra de decisiones democráticas amparándose en la violencia, amenazándonos con el Ejército. PSOE y PP tienen una unidad de acción en lo universal.

P.-¿Cómo se construye un Estado Libre Asociado sin el PSOE y el PP?

R.- Ya lo iremos viendo. Lo primero es que hay una decisión de una mayoría que el Gobierno del PSOE debe respetar. A su vez, si se respeta y entiende la decisión, y vamos hacia el referéndum, en ese camino pueden estar el PP y el PSOE. Seguro que tiene que haber puntos de encuentro.

P.-¿Cómo van a lograr puntos de encuentro con el PP y PSOE?

R.- La clave está en que acepten la decisión del Parlamento y que empieza un camino que en el que deben respetar la representación de los ciudadanos. Veremos cómo hacen ese camino.

P.-¿El quid de la cuestión es que se reconozca el derecho de autodeterminación?

R.- Lo raro es que no lo reconozcan al pueblo vasco y no tengan duda sobre otros pueblos como el palestino. Hay un choque de intereses entre los nacionalistas españoles con los derechos vascos.

P.- Volviendo otra vez a los datos del reciente Euskobarómetro. Un 55% de los ciudadanos no sabe aún si votaría a favor o en contra en una consulta.

R.- Las condiciones van a cambiar y eso va a requerir que los ciudadanos entiendan los pasos que se van a dar. Las cosas se demuestran cuando se pregunta de verdad.

P.- No hay duda de que EA defiende el derecho a la autodeterminación. ¿Y el PNV?

R.- Yo defiendo la independencia. Pero hay conceptos de partida innegables. El derecho de autodeterminación ya lo tenemos como pueblo, pero por compromiso con el PNV, en el año 2001 EA acordó que constara explícitamente en el pacto de coalición. Yo no le daría muchas vueltas porque es algo que en 2001 la mayoría de los ciudadanos ya votó.

P.- ¿No cree que hay sectores del PNV contrarios a la autodeterminación?

R.- Es un compromiso electoral que permitió abrir un camino para caminar hasta donde hemos llegado ahora